Acompañado por los vecinos del barrio La Paz, el alcalde Jaime Pumarejo Heins hizo el lanzamiento del plan piloto del nuevo sistema de alarmas comunitarias llamado ‘Mi Cuadra Segura’, una estrategia que iniciará con la instalación de 100 dispositivos y hace parte de los Frentes de Seguridad impulsados por la Policía Nacional y coordinados con los gestores de convivencia de la institución, apoyados a través de la Oficina para la Seguridad y Convivencia Ciudadana.
“Tenemos otra medida contundente en la lucha contra el hurto y contra los delitos de impacto que afectan a la ciudadanía. Hoy estamos lanzando la estrategia de frentes de seguridad con tecnología que la Oficina de Seguridad y Convivencia Ciudadana está poniendo al servicio de la Policía y de la ciudadanía”, explicó el alcalde Pumarejo.
Durante el recorrido por las calles del barrio La Paz, el mandatario distrital destacó la importancia de trabajar en equipo con la comunidad.
“Hoy tenemos a 50 habitantes del barrio La Paz generando un frente común de seguridad, son 50 ciudadanos empoderados que han sido capacitados para ser promotores de convivencia y seguridad. Ellos tienen una herramienta, que es la tecnología, para comunicarse con la Policía y con nosotros”, dijo.
El alcalde mostró a los residentes del sector que con la activación del sistema “se acciona una cámara, una alarma y dan notificación a la Policía y a nuestro centro de inteligencia para que podamos atrapar y asegurarnos que los bandidos no nos roben la tranquilidad”.
En ese sentido, el alcalde aseguró que “estamos ganando la batalla, pero no nos vamos a detener. Con 99 frentes más como este en La Paz, con tecnología, apoyados con la drónica y con integración de cámaras estamos seguros que estamos haciendo de Barranquilla un lugar seguro, tranquilo y un lugar donde prosperan los sueños, las oportunidades y donde los bandidos no tienen cabida”.
Las nuevas alarmas comunitarias funcionan con un botón de pánico o interruptor que el ciudadano mantiene en su poder, una vez que este botón se acciona genera un reporte al Centro Automático de Despacho de la Policía (CAD), igualmente, envía mensajes de texto al comandante de la estación de la localidad, a la Policía del cuadrante y al comandante del CAI más cercano.
Cuando la alarma recibe la señal por parte del interruptor se activan luces y sonido para la disuasión del hecho delictivo. Asimismo, una cámara de vigilancia se habilita para que la Policía pueda visualizar qué tipo de emergencia ocurre en el lugar donde se genera la alerta y permitirá a las autoridades tener el geoposicionamiento del incidente.
“Son más de 50 participantes de este barrio que decidieron organizarse con la policía y con el apoyo de la Alcaldía distrital para hacer este lanzamiento. Esta tarea, que es indispensable para contrarrestar cualquier hecho delictivo, se hace entre todos: la Policía, la Alcaldía y la comunidad”, manifestó el comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, general Diego Rosero.
La implementación de este nuevo sistema de alertas para la comunidad hace parte de la estrategia que las autoridades distritales y policiales han puesto en marcha para fortalecer la seguridad en las zonas donde se han presentado mayor ocurrencia de delitos, además garantiza la optimización de la respuesta por parte de la fuerza pública, facilita la gestión de reportes hechos por parte de la comunidad mediante una alternativa a las llamadas de emergencia a la línea 123 y aumenta la capacidad de evidencia multimedia frente a hechos delictivos.
“Este nuevo sistema de alarmas permite una atención más oportuna a los barranquilleros al momento de una emergencia, al tiempo que ayuda a las autoridades ejecutar su operatividad de una mejor manera. Con la puesta en marcha de esta estrategia, seguimos modernizando a la ciudad en materia de seguridad y fortalecemos la comunicación con la ciudadanía”, afirmó el jefe de la Oficina para la Seguridad y Convivencia Ciudadana, Nelson Patrón Pérez.
Las alarmas son una apuesta de trabajo conjunto entre Alcaldía, ciudadanía y Policía, el cual está acompañado de un proceso de intervención comunitaria, con capacitaciones y pedagogía para promover la cultura de la seguridad y la corresponsabilidad en los ciudadanos. A través de esta articulación se asignan como responsables del correcto uso de estos dispositivos, a las organizaciones comunitarias y los frentes de seguridad de los barrios donde se priorizará su instalación, de acuerdo con los estudios de seguridad de la Policía.
El barrio La Paz, donde comienza el plan piloto, tiene como líderes del proyecto a los miembros del frente de seguridad del sector de la calle 107 entre carreras 12 y 13F, integrado por 50 personas entre las que se distribuirán 5 botones de pánico de manera confidencial para proteger la identidad de los ciudadanos.
El proceso para la creación de esta organización inició el 22 de enero, durante una visita realizada con la estrategia de las Caminatas por la Seguridad, convocadas por la Policía Metropolitana y apoyadas por la Oficina para la Seguridad y Convivencia Ciudadana, a partir de ahí se desarrollaron reuniones de socialización y capacitación para la puesta en marcha del sistema de alarmas que se replicará en otras localidades de la ciudad.
Jorge Martelo, vocero del frente de seguridad del barrio La Paz, agradeció a la Administración distrital y a la Policía por la implementación de este sistema tecnológico que impactará en su comunidad.
“Es muy importante porque nosotros siempre hemos tenido problemas con la inseguridad, y hoy que la Alcaldía distrital y la Policía nacional han implementado este sistema de seguridad nos sentimos muy contentos, más seguros. Vamos a trabajar de la mano con la Policía, así no vamos a estar solos”.
¿Cómo funciona un frente de seguridad?
Desde 1998 la Policía Nacional implementó la estrategia de frentes de seguridad en todo el país, como un modelo de asociación comunitaria en red para comunicación entre vecinos y policías.
En todos los Centros de Atención Inmediata, CAI, están los Gestores de Prevención, quienes asesoran y coordinan este tipo de iniciativas para que la organización quede registrada en la red de apoyo de la institución.
Una vez conformado el frente, la Policía hace seguimiento a la organización comunitaria con reuniones mensuales, donde se comparten experiencias, se plantean necesidades e iniciativas sobre convivencia y seguridad en el sector al que pertenece el frente. De igual manera, se dinamizan los canales de comunicación entre los miembros del frente y las autoridades para no perder contacto.
Gracias a los frentes de seguridad, la comunidad puede acceder los espacios pedagógicos de la Policía con cursos y capacitaciones sobre la normatividad de seguridad vigente, como el Código de Policía y mecanismos alternativos para la resolución de conflictos.
Los frentes de seguridad también cuentan con el respaldo de la Oficina para la Seguridad y Convivencia Ciudadana para materializar sus iniciativas y fortalecer los mecanismos de comunicación con las autoridades.